Retratando ella desvelaba a la noche,
su arte era tal que hasta el trinar de aquellos seres se plasmaba en el papel,
sus focos incesantes no dejanban de centellear,
su mirada era penetrante y a veces hasta osada,
pero todo merecía la pena por captar ese ángulo,
esa sonrisa
y ese momento que nunca más volverá......
Y de repente, me tope por casualidad con este blog, bastante bueno, y me sacó una risa, jajaja... me tienes enlazado, Genial...
ResponderEliminares un honor...
Buenísima la descripción, a uno que le encanta la fotografía, se siente identificado, es como cuando la gente te queda mirando raro por estar fotografiando, ahora se puede saber mas o menos que piensan...
Saludos y mana!
supertruper que pasaras por mi blog...le espero siempre por ahi y leer tus aventuras y divagaciones...
ResponderEliminarsalud!
Tamara... sin H....
ResponderEliminarHola
Soy Thamara... con H
Un gusto.
jajajajaja
Besos mUACKS!